En el momento en el que se toma esta
serie de fotografías se observan más de 30 cóndores
volando en total armonía y paz , algo así como una gran
danza en el cielo a pesar de los fuertes vientos provenientes de la
Cordillera de los Andes. En la zona ya se visualizaban más de
60 cóndores y seguían llegando naturalmente sin ningún
tipo de artificio como si acaso se tratara de una gran cita en la que
solo es necesario el espíritu y en donde las palabras sobran.